8.2.11

"Reté a las compañías a que me pagaran por ser su cliente"

¿Qué le parece la idea de pasarle factura a su restaurante favorito o al cine al que acudió recientemente a ver una película?

Pues eso es precisamente lo que hizo un británico, que envió facturas a unas 50 empresas, cobrándoles por el tiempo que invirtió en ellas como consumidor.

"Se trató de un experimentó mediante el cual reté a las compañías para que me pagaran por ser su cliente", dijo a BBC Mundo Paul McCrudden, experto en techología digitales.

Durante seis semanas, McCrudden calculó el tiempo que pasó interactuando con diferentes empresas y organizaciones, desde las filas que hizo en la oficina de correos hasta un concierto al que asistió para ver a la banda británica The Killers.

"Quería ponerle un valor a la atención y al tiempo que los consumidores le dan a una empresa o a una marca, ya sea mirando un programa de televisión o haciendo fila para comprar el boleto de entrada al cine. Ese tiempo implica grandes beneficios para esas empresas, pero no se recompensa", señaló.

McCrudden calculó la tarifa que cobró a las empresas sobre la base del salario que recibe de su empleador, pero le aplicó un 75% de descuento para "reflejar el hecho de que el tiempo que paso haciendo fila en una tienda no es tan productivo como el que paso en el trabajo".

¿Loco de remate?

Unas 50 empresas recibieron facturas y algunas de ellas pagaron.

Para sorpresa de muchos, varias de las compañías pagaron, ya sea en efectivo o en vales o cupones de descuentos.

La cadena de comida Pret A Manger le envió un cheque por 62 libras esterlinas (US$99.7), incluyendo el pago de una libra esterlina por el tiempo que llevaría cambiar el cheque. En una carta, el fundador de esta empresa agradeció incluso a McCrudden por el "generoso descuento" que aplicó a la tarifa.

BBC Mundo contactó a Pret A Manger para conversar sobre el tema, pero la compañía dijo que no comentaría al respecto.

Otra cadena, Eat, le ofreció 15 libras esterlinas en cupones (la factura era de poco más de seis libras), mientras que la red de restaurantes Little Chef le ofreció 30 libras esterlinas (US$48.2) y le agradeció por "el servicio que prestó como consumidor".

Pero a otras empresas, la iniciativa de Paul McCrudden no les hizo ninguna gracia.

"Al principio pensé que el tipo estaba loco de remate o incluso que se trataba de una broma", dijo a BBC Mundo Mark Lilley, director ejecutivo de la cadena de restaurantes británica Abokado.

La idea de que los consumidores puedan cobrar por el tiempo que pasan con una organización es totalmente ridícula, Mark Lilley, director ejecutivo de Abokado. Además de negarse a pagar, en su carta de respuesta Lilley lo insta a buscar algún pasatiempo. "No se si estás realizando un experimento sociológico, pero si tienes tiempo de sobra, te recomiendo que te busques algún pasatiempo".

¿Más poder para el consumidor?

Paul McCrudden señaló a BBC Mundo que el objetivo de su campaña era utilizar medios sociales como Facebook, Twitter y su propio blog para resaltar la necesidad de que se valore el tiempo del consumidor.

"Lo interesante es que quienes me respondieron fueron los directores ejecutivos o los directores de operaciones, lo que significa que las empresas no sabían cómo manejar la situación y refirieron el caso a las altas esferas", señala.

Según el analista de temas de tecnología de BBC Mundo, David Cuen, este es un ejemplo de cómo las redes sociales le han dado a las personas una nueva plataforma de expresión. "Cada vez más personas las utilizan como un medio para asegurarse de que las empresas las escuchen".

"Al tratarse de espacios públicos -en los que cualquiera puede leer los mensajes-, las redes sociales se han convertido en efectivos mecanismos de presión para ciudadanos y consumidores".

Mark Lilley admite que esto es así y destaca que las empresas están escuchando más, pero advierte que "la idea de que los consumidores puedan cobrar por el tiempo que pasan con una organización es totalmente ridícula".

Paul McCrudden admite que no seria viable que todas las empresas paguen en forma monetaria, pero resalta que sí se pueden utilizar formas para valorar el tiempo del consumidor, ya sea con descuentos en tiempo real o por otros medios.


Fuente: BBC Mundo

No hay comentarios:

Publicar un comentario